Infieles


Resulta curioso, ante la falta de consumo y para festejar en estos tiempos la supervivencia comercial, se me ocurrió poner carteles y descuentos en la temporada de invierno, también para recordar en mi barrio los 27 años que llevo con ellos, he visto cerrar muchos comercios de todo tipo y cómo apenas dos calles más abajo se ha ido apagando el barrio hasta quedar reducido a  oscuros sooportales de cerrados locales intransitables.
27 años frente a los escasos dos meses que lleva abierta la nueva franquicia que se ha venido a posar en mi terreno justo en un momento donde lo inimaginable era que además de luchar con la crisis, el desempleo, la prima de riesgo, tuviéramos que luchar con la apertura de otra más de las tiendas de una franquicia famosa por tirar los precios, que hace más las veces de oulet, que de corsetería, pero que además está jugando sucio al vender no bajo cuerda y tapadillo otras de las marcas que nosotros trabajamos y no pertenecen a sus marcas franquiciadas, sino descaradamente exponiéndolas en la entrada y hasta en el escaparate los mismos modelos que días antes exhiben los míos. Parece que les gusta jugar sucio.

Pues bien, como quiera que durante todo el año mis clientas me piden con más o menos simpatía descuentos y rebajas, se me ocurrió poner unos precioso carteles en donde festejábamos nuestros 27 años en el barrio por lo que hacemos “descuentos a la fidelidad”.
Curioso....desde que tengo los carteles en los escaparates ya nadie me pide descuentos, como si no fuera con ellas la cosa. 
Ay….mis queridas infieles!